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Santa María Josefa del Corazón de Jesús Sancho de Guerra, Fundadora de las Siervas de Jesús de la Caridad.

Primera Santa alavesa. Fundadora de una congregación religiosa dedicada al cuidado de enfermos y demás obras de caridad relacionadas con el mundo de la salud y asistencial.

Biografía[aldatu | aldatu iturburu kodea]

María Josefa Sancho de Guerra nació en Vitoria (España) el 7-9-1842. Hija primogénita de Bernabé Sancho López de Arregui de profesión sillero y de Petra de Guerra Zuazo, matrimonio establecido en el casco viejo vitoriano, en la calle de la Herraría nº 108,  que actualmente es el 82. Una calle estrecha, con sabor a gremios artesanales, como tantas del casco antiguo de Vitoria. Por sus cercanías pasaba el camino de Santiago.

Más tarde vendrá al mundo María de la Purificación el 7 de febrero de 1847, que solo vivirá dos meses, ya que morirá el 17 de abril. El 29 de febrero de 1848, nacerá la tercera y última de las hijas del matrimonio, Macaria Angela,

La familia de María Josefa pertenecía a la clase trabajadora. En Vitoria la industria no existía, solo artesanía y pequeño comercio

A los dos años, según la costumbre del tiempo, María Josefa recibió la Confirmación. El Obispo de Calahorra, Don Pablo de Abella le administró el Sacramento el día 10 de agosto de 1844.[1]

Niña de dos o tres años, sale de paseo con la joven que la cuida. Por un involuntario descuido de esta, Mª Josefa sube a un banco, se cae, y queda tullida de las dos piernas. No puede tenerse en pie. En vista de que el diagnóstico médico es desalentador, los padres recurren a la fe.[2]

En la cumbre del Aralar, se encuentra el santuario de San Miguel Arcángel, San Miguel in Excelsis, ermita del siglo VI que recuerda la aparición del Arcángel en aquellos parajes. Colgadas del muro se encuentran las cadenas que durante siete años Teodosio de Goñi llevó a la cintura en penitencia por el asesinato de sus padres, hasta que se rompieron en señal del perdón de Dios. Los peregrinos han acudido durante siglos al famoso santuario navarro para pedir la intervención de San Miguel Tomaban en las manos las cadenas, y pasaban debajo de ellas, invocando al Arcángel. [3]

Al santuario de Aralar marcharon Bernabé y Petra llevando en sus brazos a la pequeña Mª Josefa. Allí, Bernabé levantó las cadenas, para que Mª Josefa pasara debajo de ellas; y luego hizo dar la vuelta a la niña en torno a la verja de la estatua del Arcángel. M ªJosefa hizo sola el recorrido como si nunca hubiera estado tullida: sus piernas eran tan fuertes y sanas como antes de caerse del banco. Estaba curada.

El 24 de marzo de 1850 pierde a su padre por una embolia cerebral. La situación de la familia queda en pobreza, y la madre será la que saque adelante a sus dos hijas.

El día 2 de febrero de 1852 recibirá el sacramento de la Eucaristía, y se fortalecerá su deseo de amistad con Cristo.

Itinerario[aldatu | aldatu iturburu kodea]

A los quince años, su madre decide que Mª Josefa marche a Madrid para recibir mejor educación, ampliar horizontes y tener nueva visión de la vida de la que podía ofrecer una ciudad de provincias. En casa de unos parientes, pasará tres años, hasta cumplir los dieciocho, en que regresará a Vitoria convertida en toda una mujer.

Los años de Madrid dejan una profunda huella en Mª Josefa. Y cuando regrese a Vitoria, unos años más tarde, ya llevará claramente formado en su mente, el camino que desea realizar para el futuro. Desea ser religiosa.

Los primeros pasos están encaminados hacia la vida contemplativa, dado su temperamento reflexivo y silencioso. El P. Mariano de Estarta, O.F.M. C. le indica la conveniencia de probar en el monasterio de las Concepcionistas Franciscanas de Aranjuez, en Madrid, dirigido por la Madre Patrocinio, la monja de las llagas, amiga de la reina Isabel II. Pero una enfermedad de tifus le impide cumplir su deseo.

Repuesta de la enfermedad, en 1863 viaja de nuevo a Madrid, y allí, se encuentra con que la M. Patrocinio había marchado desterrada a Francia a causa de la inestabilidad política, y sus conventos corrían peligro de disolución, por lo que era mejor no comprometerse en aquel proyecto. La revolución de 1868 hará caer la monarquía de Isabel II y llegará la primera República.[4]

En vista de ello, busca otros derroteros. Tratando de discernir cual es la voluntad de Dios en su vida, tiene un sueño en el que ve a unas religiosas vestidas de negro. Parece que esto le inclina hacia el apostolado activo, decidiéndose en 1865 a ingresar en las Religiosas Siervas de María que tenían su convento en la calle de Santa Engracia y se dedicaban al cuidado de los enfermos.

Permanece allí durante seis años, dedicada al cuidado de los enfermos en domicilios, hospitales y durante las epidemias de cólera, tifus y viruela adquiriendo un profundo conocimiento del campo del dolor y la enfermedad.

Fundadora[aldatu | aldatu iturburu kodea]

En 1866, al llegar el momento de emitir sus votos religiosos, se ve asaltada por la incertidumbre de si se encuentra en el camino que Dios le pide. Consulta con su superiora, Santa Soledad Torres Acosta y con San Antonio Mª Claret, y este le anima a proseguir pues Dios la tiene reservada para cosas grandes, pero no le aclara cuales, solo que estas son lo que menos piensa.[5]

En 1871, con otras cuatro compañeras, abandona la Congregación de las Religiosas Siervas de María, y el 25 de julio emprende un nuevo itinerario fundacional en Bilbao.

Alli le esperan nuevas experiencias, guerras incluidas, que la convertirán en Madre y maestra de un plantel de jóvenes dispuestas a seguir sus pasos para cuidar enfermos y heridos y consolar y acompañar a los que están solos y necesitados de asistencia y caridad. Será la continuadora de la obra salvadora y misericordiosa de Dios en el mundo del dolor.

De Bilbao al mundo[aldatu | aldatu iturburu kodea]

El primer destino de Mª Josefa Sancho será Bilbao. Alli emprenderá la expansión de la congregación de las Siervas de Jesús de la Caridad, que le llevará a fundar casas por toda España, saliendo al encuentro de cuantas necesidades le presenten, con enfermos en sus domicilios, hospitales, asilos, niños solos que le llevará a inventar una de las primeras guarderías de España, y siempre enfermos y más enfermos que ella y sus Siervas curan y sirven con el amor de Jesús Buen Samaritano.

También será donde la presencia del padre Mariano José de Ibargüengoitia, marque una huella decisiva en la congregación.

Serán 40 fundaciones las que se irán sucediendo a lo largo de los 40 años que preside como superiora general la congregación por ella fundada, y que dejarán su sello en las poblaciones que las acogen.

Muerte de Mª Josefa Sancho[aldatu | aldatu iturburu kodea]

En 1898 una enfermedad cardíaca irá reduciendo su actividad y le obligará a vivir los últimos 14 años en un sillón sin poderse acostar ni apoyar la cabeza. Finalmente, el 12 de marzo de 1912, entrega su alma a Dios. Todas sus religiosas, el pueblo de Bilbao y cuantos la conocen, la consideran una santa.[6]

Proceso de beatificación y canonización[aldatu | aldatu iturburu kodea]

El 26 de marzo del año 1951, se abrió el proceso diocesano de Beatificación y Canonización en la recién creada diócesis de Bilbao, terminándose el 12 de junio de 1954. El 7 de enero de 1972, la Causa viene introducida en Roma.

El 7 de septiembre de 1989, Mª Josefa es declarada Venerable. El Papa Juan Pablo II la declarará Beata el 27 de septiembre de 1992.

El 1 de octubre de 2000, el Papa Juan Pablo II proclamaba Santa a Mª Josefa del Corazón de Jesús Sancho de Guerra.[7] Su fiesta se celebra el 18 de mayo.

El Ayuntamiento de Vitoria la declaró Hija Predilecta de la Ciudad el año de 1942, al conmemorarse el centenario de su nacimiento

Escritos[aldatu | aldatu iturburu kodea]

Espiritualidad[aldatu | aldatu iturburu kodea]

Los escritos de Santa Mª Josefa del Corazón de Jesús Sancho de Guerra, se encuentran repartidos en varios bloques, correspondientes a su trabajo como Fundadora y Superiora General de una Congregación religiosa en plena expansión, y que atañen a los problemas y situación de de sus religiosas y de ella misma.


La espiritualidad de Santa Mª Josefa del Corazón de Jesús es eminentemente cristocéntrica, mariana y eclesial. Sus enseñanzas y pensamientos se encuentran recogidos en el Organismo Espiritual,[1] riquísimo filón en que encontrar su vena más profunda y original de su pensamiento y espiritualidad.


En las Cartas,[2] encontramos a la Santa humana y cercana a los problemas, necesidades y situaciones de sus religiosas y de los hombres de su tiempo.


En los Consejos y Máximas,[3] encontramos una perla para cada día del año, que nos acompaña y ayuda a mantener el espíritu en alto con la mirada fija en Dios.


[1] Organismo Sobrenatural, SIERVAS DE JESÚS, Ed. Luis Vives, Zaragoza, 1988

[2] Cartas, SANTA Mª JOSEFA DEL CORAZÓN DE JESÚS, Ed. Monte Carmelo, Burgos, 1976

[3] Consejos y Máximas, TAPIA, RESURRECCIÓN DE JESÚS, S. DE J.  Ed. Juan Bravo, Madrid, 1934.

Enlaces externos[aldatu | aldatu iturburu kodea]

D. Mariano Joséhttps://www.youtube.com/watch?v=l7syc-vmaLY

https://www.youtube.com/watch?v=ikH0oKd9Zzs Santa María Josefa

https://www.youtube.com/watch?v=_CjCqsDuRmE Puertas abiertas. Las Siervas de Jesús y su Fundadora



[1] Una Heroína de Caridad. Eulogio Nebreda CMF. Ed. La Roel, A Coruña 1954

[2] Era más que un sueño. Mª Itziar Elguea. Ed. Monte Carmelo, Burgos 2002

[3] Servir al Señor en el enfermo. José Luis Gutiérrez García. Ed. Mensajero, Bilbao, 1992

[4] Aquella misma noche. Eduardo T. Gil de Muro. Ed. Monte Carmelo, Burgos 2002

[5] Santa Mª Josefa del Corazón de Jesús. Anastasio Olabarria. Ed. Mensajero, Bilbao 1999

[6] Vida y obra de Santa Mª Josefa del Corazón de  Jesús. Alejandro Fernández Pombo. Ed. Mensajero, Bilbao, 1992

[7] Era más que un sueño. Mª Itziar Elguea. Ed. Monte Carmelo, Burgos 2002